lunes, 19 de enero de 2015

Mis maravillosos recuerdos de este gran colegio

Entrevista realizada por Julia García Donas (1ºC) a Mercedes Cabañas
 
 
Entreolivos es el primer colegio donde ejerció de profesora y en el que ha estado 38 años, todo gracias a una amiga suya que le llamó para sustituirla, y desde entonces aquí se encuentra.
 
Recuerda muy bien que el uniforme estaba compuesto por una falda de cuadros escoceses parecida a ésta pero más oscura, un polo amarillo y un jersey azul. Había solamente los cursos de segundo de infantil hasta sexto de primaria, en los cuales las asignaturas más importantes eran matemáticas, lengua e inglés. El nivel de educación era muy considerado igual que ahora, claro que han añadido nuevas asignaturas como francés y las de ESO y Bachillerato.
 
Las festividades que se celebraban eran las mismas que ahora, aunque nosotras no celebramos el día del tutor, el cual se ha quitado, el lunes de feria que se ha cambiado por el Corpus Christi y San José.
 
Nos cuenta con gran detalle anécdotas impactantes: una vez llamaron a Nieves y le dijeron que habían puesto una bomba en el colegio y tuvieron que evacuar a las niñas a las praderas del exterior con las vacas, mientras que las cocineras hacían "como máquinas" bocadillos y los bomberos junto con los policías registraban el colegio. Al final no había ninguna bomba.
 
También recuerda que ella estaba sola en el colegio con Teresa Balsera y siete niñas más cuando les comunicaron el golpe de estado.
 
Hubo una riada y las alumnas no podían salir del colegio; y por último la historia mas bonita que vivió aquí, fue que una profesora procedente de Australia la casó su padre (enviudó y se hizo sacerdote) que vino de Australia a España solamente para casar a su hija en el oratorio del colegio.
 
Ha disfrutado la visita del cardenal, la Reina Sofía, Paloma Gómez, Soledad Becerril, el cónsul de Irlanda e Inglaterra y la cruz de la JMJ.
 
Este colegio siempre ha sido educación diferenciada ya que nos beneficia porque los chicos y las chicas tenemos distintos procesos e intereses.
 
Su opinión sobre la diferencia de alumnas es que en lo esencial no hay diferencia, pero, en lo circunstancial sí.
 
Para terminar, un recuerdo de una antigua alumna: "Allí donde ahora está el Oratorio se alzaba una torre en la que las más aventureras jugaban a las brujas y las más románticas a Romeo y Julieta”.